La nutrición oncológica desempeña un papel crucial en el manejo integral de pacientes diagnosticadas con cáncer de mama. Durante el proceso de tratamiento, el cuerpo enfrenta un desgaste significativo debido a terapias como la quimioterapia, la radioterapia o la cirugía, por lo que una adecuada alimentación no solo mejora la tolerancia a los tratamientos, sino que también fortalece el sistema inmunológico, contribuyendo a una mejor calidad de vida.
La Nutrición: Pilar en el Tratamiento Oncológico
Es un mito común pensar que las pacientes con cáncer de mama deben seguir dietas extremadamente restrictivas. En realidad, no existen restricciones alimentarias reales generalizadas para quienes enfrentan esta enfermedad. El objetivo principal es garantizar un aporte adecuado de nutrientes que permita mantener un cuerpo fuerte y saludable para tolerar mejor los tratamientos oncológicos y reducir los efectos secundarios asociados.
Una dieta equilibrada debe incluir proteínas magras, carbohidratos complejos, grasas saludables, frutas, y verduras. Las proteínas son esenciales para la reparación de tejidos, mientras que los carbohidratos y grasas proporcionan la energía necesaria para las actividades diarias y los procesos de recuperación. Además, los alimentos ricos en antioxidantes, como frutas y vegetales coloridos, pueden ayudar a combatir la inflamación y el estrés oxidativo, procesos que suelen aumentar durante el tratamiento del cáncer.
Evaluación Individualizada por Especialistas
La nutrición oncológica debe ser personalizada. Cada paciente tiene necesidades y condiciones específicas que deben ser evaluadas por un especialista en nutrición, quien diseñará un plan alimenticio que se adapte a su estado de salud, tipo de tratamiento y preferencias personales. Una evaluación adecuada puede abordar problemas comunes en pacientes oncológicas, como la pérdida de peso, la disminución del apetito o las alteraciones en el gusto.
En nuestro centro, comprendemos la importancia de un enfoque multidisciplinario. Por ello, contamos con especialistas en nutrición oncológica que trabajan de manera coordinada con oncólogos y otros profesionales de la salud para garantizar un manejo integral. Este enfoque no solo favorece la recuperación, sino que también empodera a las pacientes, brindándoles herramientas prácticas para mantener una alimentación saludable durante y después del tratamiento.
Más que Alimentación, un Estilo de Vida
Adoptar hábitos saludables va más allá de la alimentación. Mantenerse físicamente activa, dentro de las posibilidades de cada paciente, también contribuye al bienestar general. La combinación de una dieta adecuada y actividad física moderada ayuda a mantener un peso saludable, lo que es especialmente importante en pacientes con cáncer de mama, ya que el sobrepeso y la obesidad pueden influir negativamente en los resultados del tratamiento.
En CeMOI, estamos comprometidos con la salud y bienestar de nuestras pacientes. Nuestro enfoque integral en la nutrición oncológica garantiza que cada mujer reciba el apoyo necesario para enfrentar con fortaleza los desafíos del cáncer de mama. La nutrición no es solo un complemento, sino un componente esencial para mejorar la calidad de vida y los resultados del tratamiento.